Dado que Puerto Rico es un país que importa un 85% de los alimentos que se consumen, se reconoce la importancia de implementar la agricultura nuevamente al país y de hacermayor y mejor uso de la misma. Jesús Aponte identifica  los problemas económicos y ambientales que se generan en el proceso de importación de alimentos como un asunto de interés en el desarrollo de su propuesta. Él  propone crear un complejo que se basa en un modelo de cooperativa de producción agrícola. Esta comunidad tiene como próposito generar una producción agraria sostenible que haga buen uso de los suelos de la cooperativa y logre aumentar la cantidad y calidad de los productos cosechados. Esta comunidad está compuesta por viviendas para las personas que trabajen los suelos, áreas administrativas, zonas de cultivo, áreas comerciales y espacios públicos. Se ubica en la Hacienda La Esperanza en Manatí reconociendo así el valor que esos suelos tienen para la producción alimentaria local. El lugar cuenta con abundantes cuerdas de terreno para la siembra efectiva y para etapas futuras de la comunidad. Aprovechando las oportunidades que provee el terreno, Jesús Aponte diseña el complejo con módulos de vivienda que evaden espacios entre ellos para permitir  la expansión de los módulos y para la siembra. Cada módulo cuenta con un área para huerto casero y entre los edificios, zonas  para parques. Los módulos están diseñados de forma básica, para que el usuario tenga la oportunidad de alterarlo y ajustarlo a su gusto y necesidad. Todas las fachadas permiten la entrada de luz y ventilación natural al hacer uso de mamparas y ventanas en celosía. Del mismo  modo cuenta con un sistema de recogido  de agua de lluvia para el uso diario de los habitantes del lugar y para las cosechas. Es un diseño sustentable, con oportunidades de expansión y sensibilidad ambiental. La agricultura como una posibilidad para el desarrollo económico del país, se vuelve relevante. Proyectos como éste, que tienen vigente su importancia, son una oportunidad para ver las posibilidades futuras de nuestro país.

Since Puerto Rico is a country that imports 85% of the produce that is consumed, it is recognized the importance of implementing  agriculture once again and making a better use of it. Jesús Aponte identifies the economical and environmental problems that are generated in the process of importation of produce, as an issue of interest in the development of his proposal. His proposal is a coop based complex. The purpose of this community is to generate a sustainable agrarian production that will make a good use of the terrains and that will manage to increase the cuantity and the cuality of the produce. This community  is composed by  living areas for the people that will work in the terrains, administrative areas, space for harvest, comercial areas and public spaces. It is located in “La Hacienda La Esperanza” in Manatí, recognizing the value of the terrain for the local alimentary production. This place has an abundant terrain for efective harvesting and for future stages of the community. Taking advantage of the opportunities that this terrain provides, Jesus Aponte designs the complex with a number of  modules for living, that evades spaces between them for expansion and for cultivating. Every module has an area for a home garden. And between the buildings there are places left for parks and green spaces. This modules are basic, in order to give the user the opportunity of altering  and adjusting it at his own preference and need. All the facades allow the entrance of natural light and wind by using jalousie windows  and  screens. At the same time, it has a system for collecting rainwater for daily use of the members of the community and for the harvest. It’s a sustainable design with opportunities of expansion and environmental sensibility. Agriculture as a possibility for the economical development of  our country, is relevant. Projects like this one, that recognise its importance, are an opportunity to see the future possibilities of our country.